martes, 25 de marzo de 2008

Las puertas del cielo [3er Fragmento]

A pesar de los innumerables meses que llevaba postrada en la cama y de las continuas y macabras sentencias del tal doctor (o matasanos, como nosotros solíamos llamarle), no creíamos que fuera a llegar este momento. Nos habíamos acostumbrado de tal modo al trío que formábamos, aún cuando Clara apenas podía levantarse, que casi nos reíamos de las absurdas palabras del médico.

Mi madre era particularmente reacia a nuestra relación y siempre me repetía: “¿Qué pintas tú de continuo andando d’arriba p’abajo con una parejita?” Ella no entendía. Y yo al principio simplemente la ignoraba cuando me insistía con tales preguntas. Al final directamente dejé de ir a verla.

No tardo Jack en venir, y mientras me consolaba a mí, veía como Marcos se serenaba sin haberse acercado siquiera el vaso a los labios, a pesar de que yo seguía sumido en un profundo pesar, como si solo inhalando el aroma del dulce néctar o admirando sus reflejos dorados éste hubiera paliado todos sus males. Completamente tranquilo me dijo que quería ir a casa. “Tengo algo que enseñarte”. Le miré entre sorprendido, asustado y suplicante, y a pesar de todo no pude decir más que un apagado “vale”.

No estoy seguro de qué número aparecía en el billete que reposaba sobre la mesa cuando nos marchamos y, aunque no lo creáis (ni yo mismo), me pregunto continuamente dónde estarán las malditas vueltas, pero entonces no me importó en absoluto. Al fresco ambiente gobernante en el bar lo siguió el asfixiante calor de fuera, por lo que yo, si es posible, sentí derrumbarme aún más. Busqué la mirada de Marcos pretendiendo encontrar de nuevo aquella conexión solo propia de gemelos, pero quede desconcertado: había desaparecido.

Ya no había bamboleo en los andares de Marcos, habían desaparecido las grietas de su castillo. Solo quedaba determinación y algo parecido a la serenidad, o incluso a la felicidad. No salía de mi asombro, ni tampoco del suyo.

Continuará...

1 comentario:

Elenthir dijo...

Yo tampoco salgo de mi asombro, progresa adecuadamente que dirían en Primaria.
Cuidate!! Esperamos nuevas actualizaciones.